A estas alturas puedo decir que
los principios de la termodinámica son irrevocables. Por el segundo principio,
sabemos que la Entropía (o desorden de un sistema) es una función de estado
definida positiva, esto es, que al darse un proceso cualquiera que lleve un
sistema de un estado A a otro B, al restablecerse el equilibrio encontraremos
que la entropía o bien se ha mantenido igual que antes de inciarse el proceso,
o ha aumentado. Es decir, el desorden se mantiene o aumenta.
De manera que, retrocediendo un
poco y haciendo un ejercicio mental, podemos cambiar el punto de vista y ver
que lo que ocurre al eliminar una ligadura de un sistema provocando así un
proceso es que el sistema sólo evoluciona hacia los estados que le están
entrópicamente admitidos, es decir, sólo puede ir hacia un estado final de
entropía igual o mayor.
Hagamos ahora una barbaridad y
mezclemos la termodinámica de estados con la variable temporal. Si inciamos una
cadena de procesos, teniendo en cuenta que sólo pueden evolucionar a los estados
antes mencionados, veremos que, siempre con una cierta probabilidad, pero el
sistema evoluciona según nuestra norma del segundo principio.
Usando el ejemplo que nos propone
Hawking: "Podremos ver como una taza se cae de una mesa al suelo y se
rompe, pero nunca veremos como los trozos se recomponen y la taza vuelve
intacta a la mesa" Y todo esto porque la taza rota es más caótica
que la taza entera, con lo cual la entropía aumenta al romperse y el proceso
está permitido; pero disminuiría en el proceso inverso, con lo cual éste
proceso no puede tener lugar.
Resumiendo, es el postulado del
incremento de entropía lo que le da dirección al tiempo, puesto que éste sólo
puede discurrir en el sentido en que la entropía aumente.
El caos le da sentido al tiempo.
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